Los repetidores de alarmas actuales, además de su uso básico y lógico que es ‘chivarse’ de un error o posible situación problemática, han ido evolucionando para ayudar a actuar al personal médico. Y es que a menudo, los trabajadores sanitarios han considerado a esta alarma como un ‘incordio’ necesario, viendo como una molestia su requerido mantenimiento.
El hecho es que, con cierta frecuencia, el personal médico no ha sabido cómo actuar frente a estas alarmas. O simplemente desconocía la situación de riesgo que se estaba produciendo, sobre todo en las alarmas relacionadas con la seguridad eléctrica.
Pero actualmente, los repetidores de alarmas no solo proporcionan información adicional al personal médico, sino que indican qué hay que hacer en todo momento para solucionar la situación, o a quien hay que llamar. Con ellos, destacan también las pantallas táctiles en los paneles técnicos, por ejemplo en los quirófanos, lo que permite la visualización gráfica de la alarma con iconos y colores.