La pandemia por coronavirus ha impulsado la innovación y la mejora de la desinfección de todas las áreas hospitalarias.
Una de las consecuencias inmediatas del COVID-19 ha sido la intensificación de medidas de limpieza y desinfección en los hospitales, especialmente en las áreas críticas.
Limpiar y desinfectar las superficies de los centros sanitarios ha supuesto y sigue suponiendo un gran esfuerzo. Especialmente considerando que los gérmenes del virus pueden sobrevivir en cualquier área de un hospital.